Junio-Julio 2019
Durante los meses de junio y julio, la generación 4 de la maestría tuvo a bien vivir dos encuentros centrados en los pedagógico, el primero hacía alusión a reconocer las dinámicas de los grupos, su formación, vida y función, la importancia de éstos para potenciar comunidades de aprendizaje en sus espacios laborales; y el segundo con el módulo de procesos de aprendizaje, el grupo pudo revisar y analizar las maneras en que aprendemos y los estilos de aprendizaje que tenemos, esto como base de cualquier proceso educativo incluyente y diverso.
Para la generación 3, quienes se encontraban en la recta final de su proceso formativo, se posibilitó el espacio para dialogar sobre sus avances de sus propuestas de incidencia política para la transformación socioambiental con ello celebramos las apuestas pedagógicas a favor de la vida. Seguidamente se dio el módulo de comunicación para la transformación socioambiental en donde pudieron analizar cómo la comunicación es también un territorio en disputa, por tanto, se vuelve imprescindible hacer de los medios, medios de y para la transformación de realidades en opresión.
Agosto-septiembre 2019
En el periodo de agosto a septiembre, la Maestría en Educación y Comunicación Participativas se siente muy complacida y orgullosa por los avances que pasito a pasito hacen y elaboran cada estudiante en el despliegue de su proceso formativo. Gracias les damos por permitirnos caminar, indagar, curiosear, preguntar, jugar y amar las rutas de lo posible para reinventar-nos y repintar al mundo del que formamos parte.
La generación 4 durante estos meses pudo acercarse al campo de lo estratégico a través de la didáctica participativa, con ello vislumbró el poder hacer instaurado en la creación y creatividad que lleva hacer facilitación. Asimismo, celebraron el camino andado durante su primer año en la maestría, recordando y agradeciendo el por qué y para qué están en este proceso.
Para quienes integran la generación 3: Abel, Adriana, Lucía, Alondra, Fermín, Leticia, Karen, Oliver, Erick y Sarai, estos meses significaron cierre y despedida de un proceso maravilloso. Les agradecemos todo lo compartido y les deseamos que su trayectoria personal devenga en nuevas creaciones para resignificar las prácticas de educación y comunicación ambiental en sus terruños.
A continuación, compartimos la palabra de cada uno de ellos y ellas, gracias por honrar a la maestría y al espacio Moxviquil con su presencia.
“El proceso en la maestría fue transformadora para mí, en lo profesional, pero sobre todo cambio mucho mi forma de ser y de ver las cosas, descubrirme, mirarme de otra manera. Trabajar lo emocional, espiritual y desde el corazón han hecho de mí otra mujer. Fue una educación tan diferente a las que me habían dado y sin duda es con la que me quedo la cual me ayudo abrir puertas, y que por supuesto seguiré adelante por lograr mis sueños el ser una mujer que deje huella en el mundo por mis actos, por lo que haga por tener un mundo mejor”.
Karen Urbina
“La transformación es una palabra que ha cobrado sentido en este caminar y ha permitido que mi ser cambie, tome diferentes formas. Me ha dado la posibilidad de moverme, de encontrar otras maneras de estar presente, de construirme como sujeto, de conversar con mi ser y con los demás (mi familia, todos), con los que me han acompañado en este proceso y de los que me rodean. Me ha posibilitado dar-darme cuenta que, a través del amor, la conversación, la escucha atenta de mí y del otro, podemos intentar tejer y compartir juntos un encuentro que va ayudando a recrearme-nos y a florecer como un ser humano consiente de las emociones, de la diversidad y de vernos con la capacidad de reconstruirnos”.
Lucia Domínguez
“Buscaba la plata y encontré oro:
Unas miradas hacia adentro en un ámbito grupal y educativo
Un toque individual y también colectivo: Sentir pensar y hacer, transformar−nos. Un paso al camino del ser−humano"
Erick Gutiérrez
“Me ha hecho mucho más consciente de mi conexión con la tierra, de aprender a mirar al otro, a escucharlo y comprenderlo, la vida no se trata de competir, sino que, colaborando, juntos, codo a codo, floreciendo de manera individual, podemos hacer más de manera colectiva”.
Alondra Navarro
“Cambiar la idea con la que hemos crecido no es fácil, pero vale la pena cuando se trata de evolucionar para bien de todos”.
Oliver Martínez
“Es un proceso de evolución y transformación, después miras al mundo con otros lentes, pero lo más importante es verte en el mundo y te das cuenta como contribuyes a que sea como es”.
Abel Flores
“Me gustaría compartirles una certeza que descubrí desde mi incursión en la maestría y es que ¡soy feliz! no porque lo no lo fuera antes solo que ahora lo puedo nombrar con seguridad. A casi cumplir dos años de haber iniciado esta bonita experiencia he experimen-tado la evolución de mi Ser-Educador, las clases, risas, apapachos, peleas han sido aprendizajes fundamentales en la construcción de mis ideales, el pensar que pronto este ciclo cerrará me hace sentir muy nostálgica pero también sé que soy muy afortunada por haber coincidido con tan excelentes maestros de vida mis compañeros y facilitadores que se han vuelto mi familia”.
Sarai López
“De asombros, descubrimientos y autoconocimiento… innumerables encuentros con la sensibilidad, la creatividad y la empatía … me brindó la oportunidad de vivenciar y soñar junto a mi grupo otras realidades posibles, esas que se construyen desde lo colectivo, desde las cosas que nos movilizan, desde el amor”.
Adriana Rodríguez
“En realidad, yo esperaba que fuera una maestría más como todas, pero la verdad, ésta ha significado una gran sacudida a todo lo que soy. Después de esta, ya nada será igual para mí. Si no quieres salir de tu zona de confort, no es para ti”.
Leticia Dolores Gómez
